La unidad del cuerpo


En este mensaje debemos ver algo más acerca del Cuerpo. Efesios 4:4 dice: “Un Cuerpo, y un Espíritu”. Aunque esta frase es muy breve y sencilla, incluye toda la vida del Cuerpo. El Cuerpo es uno, y el Espíritu también es uno. El Cuerpo y el Espíritu son inseparables. Podemos comparar el Cuerpo con nuestro cuerpo físico, y al Espíritu con la vida de nuestro cuerpo físico. Si nuestro cuerpo no tuviera vida, no sería un cuerpo, sino un cadáver. El Cuerpo, el cual es la iglesia, no puede ser separado del Espíritu. Donde está el Cuerpo, allí también debe estar el Espíritu; y el Espíritu debe ser uno con el Cuerpo. Si usted tiene el Cuerpo, entonces también tendrá al Espíritu. Pero si no tiene al Espíritu, entonces el Cuerpo está muerto. 

El Cuerpo, la iglesia, no tiene que ver con la religión, las enseñanzas, la teología, las prácticas y el servicio a Dios, ni con el hecho de realizar una obra para Cristo. En vez de todo esto, el Cuerpo tiene que ver con el Espíritu. Debido a que el Espíritu es uno solo, no puede existir más de un solo Cuerpo.

En Efesios 4:4-6 Pablo enumera siete “unos”: un Cuerpo, un Espíritu, una esperanza, un Señor, una fe, un bautismo, y un Dios y Padre. Y en Efesios 4:4 Pablo dice: “Un Cuerpo, y un Espíritu”. El Cuerpo es mencionado antes que el Espíritu debido a que la unidad entre nosotros está relacionada con el Cuerpo y es para el Cuerpo. Además, este versículo no solamente revela la unicidad del Cuerpo, sino que también muestra que el único Cuerpo es determinado por el único Espíritu.

Debido a que hay un solo Espíritu, hay un solo Cuerpo.  Debemos mantener la unidad única del Cuerpo porque el Cuerpo y el Espíritu son uno. El Espíritu es la esencia del único Cuerpo. Sin el Espíritu, el Cuerpo está vacío y carece de vida. El Cuerpo en Efesios 4:4 es el Cuerpo de Cristo, y la esencia del Cuerpo de Cristo es el Espíritu. Por tanto, el Cuerpo y la esencia del Cuerpo son uno. Debido a que hay un solo Espíritu, hay un solo Cuerpo. Además, hay una sola circulación, una sola comunión, de vida en el Cuerpo. Esta circulación es la comunión del Cuerpo de Cristo. 

La comunión divina

 El único Cuerpo, la única iglesia universal, incluye a todas las iglesias locales. Puede haber miles de iglesias locales, pero todas ellas juntamente constituyen una sola iglesia universal.

 La comunión divina es la realidad del vivir en el Cuerpo de Cristo. Durante los siglos, el Señor ha sido obstaculizado por la falta de comunión. En Apocalipsis 22:20 el Señor Jesús dijo: “Vengo pronto”, pero Nosotros somos restringidos en esta comunión. Al ser restringidos en esta comunión, el Cuerpo de Cristo es guardado en unidad y la obra del ministerio sigue adelante. ya han pasado aproximadamente dos mil años, y el Señor todavía no ha regresado. Esto se debe a que los creyentes son individualistas, independientes, están llenos de opiniones y son divisivos. La Iglesia Católica Romana controlaba a la gente por medio de su organización, pero aquellos que se han separado del catolicismo han introducido división tras división.  En realidad, es la comunión divina lo que debe controlar a los creyentes. 

 Entre todas las iglesias que componen el único Cuerpo universal de Cristo no hay organización, sino la comunión del Cuerpo de Cristo.  Si todas las iglesias permanecen en esta circulación, en la comunión del Cuerpo, ellas estarán sanas. Sin embargo, el pensamiento humano natural es el siguiente: necesitamos tener una organización o no tener nada que ver con los demás. Por un lado, no debe haber organización alguna entre las iglesias; por otro, debemos estar abiertos a tener comunión con todas las iglesias. Sin embargo, la iglesia en cierta localidad o las iglesias en una región en particular podrían no estar dispuestas a tener comunión con otras iglesias. Esta actitud es por completo errónea.

La unidad del Espíritu

El tema de esta sección es: guardar la unidad del Espíritu. Efesios 4:3 dice: “Diligentes en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz”. La palabra diligentes implica que debemos procurar a toda costa guardar la unidad. Ésta no es la unidad de doctrinas ni la unidad teológica, sino la unidad del Espíritu. La unidad del Espíritu es sencillamente el Espíritu mismo. Por lo tanto, guardar la unidad del Espíritu equivale a guardar el Espíritu. Si usted no está en el Espíritu, no está en unidad. Si está en cualquier otra cosa aparte del Espíritu, estará en división. El Espíritu es la unidad. Por esta razón, a la unidad se le llama la unidad del Espíritu. Si usted está en el Espíritu, entonces también estará en la unidad. Pero si se encuentra fuera del Espíritu, ya no estará en unidad, sino en división. Tal vez no se percate de lo serio que es esto. A fin de estar en división, lo único que se requiere es que estemos fuera del Espíritu. Cuando usted está fuera del Espíritu, no está más en unidad. Y mientras no esté en unidad, estará en división, ya que todo lo que no sea unidad es división. Aunque puede haber muchas divisiones, sólo existe la unidad única y la unidad única es el Espíritu.

Mientras usted no esté en el Cuerpo y con el Espíritu, estará en división; y mientras esté fuera del Espíritu, se encontrará fuera de la unidad. Todo cuanto usted piense, diga y haga en el recobro del Señor debe hallarse en el Espíritu. Si usted no está en el Espíritu, entonces no puede decir que está en el Cuerpo. El Cuerpo es uno con el Espíritu, y el Espíritu es la realidad del Cuerpo. Si usted no está en el Espíritu, entonces tampoco está en la unidad, sino en división. Todos los que están en el recobro del Señor necesitan recibir la clara visión de que el recobro básica y fundamentalmente consiste en recobrar la unidad del Cuerpo.

Fuentes: (El Dios Triuno es vida para el hombre tripartito, págs. 151-152) (La conclusión del Nuevo Testamento, págs. 2279-2280) (El espíritu y el cuerpo)

Entradas populares de este blog

Contacte con nosotros

Dios desea forjar a Cristo en el hombre

El bautismo

Orar según la voluntad de Dios

Cristo en la Biblia